11.04.2007

Ilustración: Viajar.

Me quedaba un ratito antes de partir, y esto es lo que he querido hacer:

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De nuevo un domingo más, me pongo a hacer la maleta con el nudo en la garganta. Algunos findes marcho a Elda, otros vengo a Madrid (si... mi Madrid :D). Siento que toda mi vida podría caber dentro de un par de maletas, y que es lo que estoy moviendo semana de aquí para allá. Es bonito cuando llegas y te esperan en la estación, pero es tan triste que vayan a ver como te vas...
Normalmente lo llevo bien, se que en un par de semanas volveré a ver a esa gente de la que me despido, sé que en un par de semanas volveré y será todo como antes de que me fuera. Pero hoy es domingo, mañana estaré en Valencia, y mi vida será totalmente distinta allí.
Nadie conoce allí a mi yo de aquí.

Un fin de semana más cojo ese último tren a cualquier parte.

Esta vez voy sin saber como voy a llegar desde la estación a la Residencia, crucemos los dedos. XDD

Un besito a todos, y dejarme dedicar esto a todos esos que viven pendientes de un horario de estación.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo malo de los horarios de una estación es que casi nunca coinciden con los de tu reloj... y mucho menos con los que marca tu corazón o tus ganas...
Pero últimamente he comprobado que las estaciones tienen una cosa positiva: en el viaje de ida, esa sensación que da en la tripa cuando buscas a quien te espera en el andén a través del cristal... en el viaje de vuelta, el empezar rápido a maquinar cuándo vas a hacer un viaje de ida otra vez.
La vida entre autobuses (o entre trenes, o entre aviones) siempre tiene esa magia de tener que esperar...¡¡y no me gusta nada, yo soy impaciente!! XDDD
Como me dijeron una vez... ánimo, queda un día menos para el próximo viaje! ;)
¡¡Buen viaje de vuelta!!

Naomi Pastor - Jayto dijo...

Ooooh! Qué razón tienes! Ya estoy maquinando cuando el viernes vuelvo a salir de aquí. ^^

marieta dijo...

Ya sé que no es lo mismo, que mi Elda está más cerca que tu Madrid, pero permíteme que me sienta identificada...

Sé lo que es estar lejos de toda esa gente a la que tanto quieres. Sé lo que es llevar tu vida de un lado a otro. Sé lo que es que no conozcan quién eres de verdad. Sé lo que es esperar ese añorado día de la semana... contar las horas que faltan para el regreso...

Cuando los viernes cojo el tren a Elda, nadie puede entender la ilusión que me acompaña en el viaje... estoy deseando llegar y ver a toda esa gente que forma mi vida. Cuando los domingos cojo el tren a Valencia... nadie puede entender el bajonaco... después de un fin de semana de sonreír constantemente, llega la hora de volver a ese lugar donde la vida parece que juega al escondite.

Pero tú me entiendes, lo sé.

Cuando Valencia acaba con mis ganas de sonreír intento pensar en esa gente que -esté o no en el andén cuando llego- espera mi llegada. Cuento los días que pasan para volver a verles...


¿Cogemos Elda, Madrid y Valencia y los juntamos en algún lugar? A media horita en tren... que los trenes molan^^

En fin, qué curiosos son los trenes...

Peirats dijo...

Soy la "prima" de Alvaro entre por curiosidad y no podia salir de la página sin felicitarte. Me encantan tus dibujos, ilustraciones... la verdad es que no entiendo mucho de esto pero me he descargado muchos de los wallpapers y demas. Enhorabuena!!!